Muchas veces el que toma la excursión de Stonehenge y Bath nos dice que les intriga esta maravilla neolítica. Pero qué hay de bonito en Bath? Y cada guía responde a su manera, pero lo mejor es jugar con el suspenso. En general respondo que Bath los va a maravillar. Es una experiencia visual, pero si hurgamos un poco, hay mucho más.
Un poco de mitología para empezar
Geoffrey de Monmouth, – cronista de la edad media británica – interpretando las poesías Galesas, escribió en el siglo XII que las termas de Bath fueron descubiertas por el rey Bladud. Un rey británico educado en Atenas donde contrajo Lepra. Por su enfermedad se lo mando a vivir aislado y a cuidar cerdos.
Un día noto que a los cerdos les gustaba bañarse en un sitio donde había un caliente y oscuro lodo. Con el tiempo vio que la piel de los cerdos era mucha más saludable que la de los demás y comenzó él a bañarse en el lodo. Y con el tiempo los efectos de la lepra comenzaron a desaparecer. Propuso construir un asentamiento, dedicado a la diosa Celta Sulis. Ella es la diosa que patrocina las aguas termales y representa al sol. Curadora y restauradora de la paz mental.
Bladud fue el fundador de una tradición de chamanes místicos que podían ver el futuro. Llego a creer que podía volar, y en la antigua Londres, llamada Trinovantum, (Nueva Troya) se arroja del templo de Apolo y muere. No siempre creer es poder.
No creo sea muy fantasioso pensar que si profesaba la tradición chamanística haya estado experimentando con hongos alucinógenos. Y en un estado mental alterado haya pensado que podía volar como un pájaro o un dios. Le salió mal la jugada, no somos dioses.
Geoffrey of Monmouth se tomaba licencia con los datos históricos, así que tenemos que tomar esto con la seriedad que se le da a la serie de televisión “The Crown”. Pero todo es posible.
Geoffrey es un recopilador de poemas y canciones Galesas que cuentan las historias de los reyes. Pero el problema era que cada uno embellecía la historia para que parezca mas atractiva. En la edad media el pensamiento mágico era lo usual. No había arqueólogos y antropólogos para darle un sesgo científico.
Bladud fue el padre de Lear retratado por Shakespeare como un Rey Demente.
Termas romanas
La historia comienza con la palabra escrita. Anteriormente lo que tenemos es leyenda. Julio Cesar invade en el año 55AC y menciona a las tribus contra las que lucho. Una de ellas son los Trinovantes que vienen de Brutus; un Troyano que se exiló en estas tierras.
En el año 44 DC los romanos descubren las termas y asocian a Sulis con su diosa de la sanación Minerva, devenida de la diosa griega Atenea. Un ejemplo de sincretismo fenomenal uniendo tres culturas muy diferentes. Es así que desde sus comienzos, la ciudad de Bath está asociada con la Grecia Antigua, la religión y la búsqueda de la salud física y mental. Un lugar donde se le rinde culto a una diosa capaz de curar, iluminar y castigar a los que nos han perjudicado.
Los romanos descubren canteras de piedra arenaria cercanas y yacimientos de plomo. Y llaman a las termas; Aquae- Sulis. Se construye un complejo de baños con grandes piletas de aguas calientes, tibias y frías, con sala de masajes y relajación. Y pasa a ser un centro social muy importante entre legionarios que buscaban sanear heridas de sus años de soldado. También se construye un templo religioso dedicado a Minerva.
Bath es ocupada por 400 años y llega a ser famosa en todo el imperio romano. Llegaron emperadores, filósofos, gobernadores y todos deslumbrados por el encanto de la zona y la ciudad. Pero todo tiene su límite y un buen día la ocupación romana de Britania termina. Cuando se dieron a la retirada, fue una operación veloz y precipitada. Muchas de sus grandes fincas quedaron abandonadas y pronto sufrieron el asedio de la población local británica que había sido abandonada a su suerte. Bath cae en total decadencia por falta de mantenimiento y los baños pasaron a no ser utilizables. A los celtas británicos no les interesaba el baño, tenían problemas mayores.
Invasión Anglo-Sajona
Llegan invasores barbaros oriundos de las costas de Anglia y Sajonia en la actual Alemania. En defensa de los británicos se levanta un rey celta pero con entrenamiento militar romano. El Rey Arturo, y la primera batalla se da en Bath. La batalla de Badon en el 500DC. Eventualmente vence la alianza Anglosajona.
Bath pasa a ser una importante ciudad del reino de Wessex, (West-saxons) – y con el tiempo llegan misiones cristianas y se construyen iglesias. En el siglo X el rey Alfredo el Grande rediseña la ciudad y ordena la construcción de una gran iglesia. La abadía de Bath. Mientras que peleaba contra los vikingos encontró tiempo para difundir la lengua Anglosajona y la variedad de cristianismo Ingles. En ésta se corona el rey Edward the Elder en 973, y el rito empleado se establece como el modelo de todas las coronaciones siguientes. Hasta el día de hoy.
Los baños romanos quedaron tapados por el lodo y olvidados el agua siguió corriendo pero sin importancia para la salud. Es como que los ocupantes post romanos ignoraban totalmente sus propiedades curativas. Y en la edad media practicar medicina fuera de lo permitido por la iglesia era sinónimo de herejía, y uno podía terminar quemado en la hoguera.
En el 1500 un obispo llamado Oliver King reconstruye la Abadía como se la ve hoy. Es una maravilla del gótico perpendicular y una de las iglesias más bellas del país.
En el siglo XVIII Inglaterra entra en un período de desarrollo económico espectacular. Los enormes beneficios de las colonias en el Caribe, Asia y África comienzan a manifestar un período de esplendor arquitectónico. La sociedad no era muy consciente de la inmoralidad del comercio a base de esclavos. Se sabía lo que estaba pasando pero no se discutía, y por mucho tiempo, los abolicionistas eran voces en el viento..
Empieza el esplendor de la regencia
Fue entonces cuando aparece un personaje muy especial e importante. Beau Nash – oriundo de Gales – , curso en la universidad de Oxford, el ejército y jurisprudencia. Pero nada de eso era su especialidad. Intuyó que la ciudad necesitaba un regulador y promotor. Y se adjudicó el puesto de maestro de ceremonias en 1704 y mantuvo su función hasta 1761. Fue lo que se llamaba un “Dandy” y por su afable y colorida personalidad atrajo mucha gente y logro ser muy admirado.
Estableció doce reglas de comportamiento y modales en sociedad, aplicables en los baños y el Salón de Asambleas donde la gente congregaba para bailar, beber, escuchar música y sobre todo fomentar matrimonios. Bath pasó a ser el lugar para presentar a la sociedad una hija apta para matrimonio. La única salida laboral para una mujer en esa época, y muchas veces un buen negocio para los padres.
Nash fue un dictador benigno y generoso. Obsesivo con la belleza y modales, pero también un jugador sin suerte. Tuvo muchas amantes y murió en la miseria económica. Su funeral fue digno de un rey como se lo llamaba. El Rey de Bath.
Su acompañante, Juliana Popjoy, quedo en la miseria. Vivió en la calle, en el hueco de un árbol hasta que los vecinos le dieron una residencia donde murió en indigencia. Muy apropiado en una sociedad tan obsesionada con lo correcto pero tan corrupta a la vez.
Se fundó un teatro, abrieron casas de juego, salones de baile, llegaron modistas, sastres, pintores y los instruidos de Inglaterra querían participar de esta ciudad nueva y maravillosa.
Se restauraron los baños y llegaron médicos, se estableció un hospital para enfermos de reuma, y todo aquel que sufría de gota, estrés, agotamiento, reumatismo o simplemente soledad, venía a Bath a tomar las aguas y bañarse.
Se llegó a creer que la ingesta de abundante cantidad de agua de las termas era una cura milagrosa. Se puso de moda el té, en una sala especial que aun hoy funciona, la “Pump Room”. Llegaron músicos, actores, compositores y el más famoso fue George Frederic Handel.
Y con toda esta camarilla de gente llegaron las cortesanas, jugadores de cartas profesionales, timadores y algunos personajes con un pasado histórico nefasto.
Vinieron refugiados de la revolución francesa, las guerras napoleónicas y llego Jane Austen.
Jane prácticamente pasó desapercibida en la ciudad. El padre le buscaba marido a ella y su hermana Casandra. Y si bien era jóvenes atractivas fue como que no había candidato que las estimulara en lo intelectual. Jane no se encariño con Bath. La vida social y trivial no era lo suyo. Jane necesitaba la tranquilidad del campo rodeada de libros. Como todo ser creativo, las interrupciones son molestas y disturban el proceso creativo. Pero la experiencia le brindo material para un par de novelas; Persuasión y la Abadía de Northanger. Hay una sutil mención de los horrores de la guerra y el comercio de esclavos, pero no era propicio una denuncia. Sería escandaloso abrir esa caja de Pandora.
En Gay Street cerca de la Queens Square hay un museo dedicado a Jane Austen. Para sus fans es un lugar importante.
Mary Shelley y su marido Percy vivieron en Bath. La novela “Frankenstein” fue concebida. Charles Dickens visitó la ciudad muchas veces. Pero terminó enfadado con la banalidad de su sociedad. La reina Victoria visitó la ciudad pero no era un sitio adecuado para alguien tan importante y moralista.
John Wood, arquitectos y místicos
Otras muy importantes personalidades de Bath son los arquitectos John Wood, padre e hijo. Por eso se los llama a uno el mayor (Elder) y a su hijo el menor (Younger).
John Wood padre era un hombre nacido en la zona y muy entusiasmado con la mística del lugar. Fue un estudioso de las historias del Rey Bladud y fue el primero en hacer un plano preciso de Stonehenge. Estaba convencido que Bladud y Stonehenge tenían una conexión.
John Wood creía erróneamente que Stonehenge era un centro religioso obra de los Druidas y que fue construido por Bladud. Cuando en realidad fue terminada la obra unos mil años antes de la llegada de los Celtas, quienes introdujeron el culto Druida. Se le comisiona construir un barrio nuevo para estimular el crecimiento de la ciudad.
Además de arquitecto era un precursor en arqueo-astronomía. El intuía que el alineamiento de las piedras de Stonehenge, estaban relacionadas con los meridianos del solsticio de verano e invierno. Y el movimiento de la luna a su vez. También fue un importante miembro de la masonería británica. Los Freemasons.
Una de sus más bellas construcciones se llama el Circus, que es una plaza hermosa construida finalmente por su hijo. A simple vista parece nada más que una bella plaza circular. Pero un estudio más a fondo revela un gran secreto. El diámetro del Circus es casi el mismo diámetro que la fosa circular de Stonehenge.
La calle de acceso a la plaza; Bennet Street, esta orientada a propósito para alinearse con el meridiano de solsticio de verano. Solo hay 29 casas, y Stonehenge tenía 29 piedras de un lado y 29 del otro representando las 29 fases mensuales de la luna. La arquitectura del Circus está inspirada en el arquitecto Italiano Andrea Palladio que fue el creador del estilo de moda en la época. Lo que en Inglaterra se llama Palladium que hace homenaje a los etilos griegos y romanos.
Pero como si esto no fuese suficiente, el Circus está unida a una plaza cuadrada llamada Queen Square por la Gay Street. Y si miramos el diseño del círculo con el cuadrado y la calle que las une parece una llave. Otro símbolo masónico. Y si al Circus le dibujamos un triángulo exterior con los lados a 90° con las tres calles que ingresan tenemos un triángulo equilátero con un círculo adentro. Otro símbolo masónico. El las cimas de las casas del Circus se ven bellotas, símbolo Druida. Simboliza masculinidad, fertilidad y esperanza.
La calle que sale hacia el Oeste del Circus nos lleva a una de las vistas más bellas de Bath. Una calle semi-circular que se llama el Royal Crescent. Y un Crescent está vinculado a la luna. Otra relación con Stonehenge y el Druidismo.
El Circus es su Stonehenge, ya que si uno se para en el centro de la plaza en el solsticio de verano veremos temprano por la mañana es sol brillar por el mismo meridiano al mismo tiempo que sucede en Stonehenge. John padre no vio su obra completada. Murió 3 meses después del inicio de la obra, que completa su hijo. Pero nos dejó su homenaje a una civilización perdida.
Por eso Bath fue declarada patrimonio de interés de la humanidad por la Unesco en 1987. Hay 32 nominaciones en Inglaterra.
Hay libros enteros dedicados al tema. Pero pocos que hacen la relación entre Stonhenge y Bath. Es trabajo de los guías dar las explicaciones en el sitio y resaltar esta relevancia.
Visita a Bath
Cuando bajamos por la Gay Street hacia la Queens Square, pasamos por el Jane Austen Centre. Un pequeño museo dedicado a la brillante novelista. Si bien vivió en muchos diferentes lugares, lo lógico es poner un museo por donde pasa tanta gente.
Pasando la Queen Square rumbo sur llegamos al Theatre Royal. Y al lado hay una casa que ha sido siempre restaurante. Es la casa donde vivió Beau Nash con Juliana Popjoy.
También se ve un excelente pub; The Garrick, en homenaje al famoso actor que David Garrick que trabajo en el teatro Real.
En el centro de la ciudad antigua está el museo de Baños Romanos. Si los tiempos dan es una visita interesante. Pero a veces las colas son largas y el acceso es limitado para que no se agolpen demasiado. Uno visita los baños del siglo XVIII y más abajo los reductos romanos que fueron descubiertos luego del daño causado por los bombardeos de la segunda guerra.
Nos pueden pedir que compremos la entrada a los Baños Romanos de antemano para evitar tanta cola.
En 1942 Bath sufrió un intenso bombardeo de la Luftwaffe. Era una acción de venganza de Hitler por los bombardeos de Lubeck y la idea era bombardear ciudades de interés turístico y cultural. Se las llamo los Bombardeos Baedeker porque se usó una guía turística alemana para elegir las ciudades más bellas. Otras ciudades afectadas por esta estrategia fueron Exeter, Norwich y York.
El comercio de Bath es también muy atractivo. Muchas hermosas tiendas y mercados como la Broad Street, el mercado en el Guildhall y el puente de Pulteney. Este puente de diseño georgiano es uno de los más bellos de Europa y tiene varias tiendas interesantes. Solo quedan en Europa un puñado de puentes con tiendas incorporadas que pagan renta.
La gastronomía de Bath es ecléctica. Muy buenos restaurantes pequeños que representan lo mejor de la gastronomía mundial.
Lo ideal para conocer Bath bien es visitarla en tren y dedicarle por lo menos dos noches. Pero si los tiempos no dan es bueno hacer una visita en tour y luego pueden decidir si quieren volver. Siendo una de las ciudades más bellas y enigmáticas de Inglaterra es algo para tener en cuenta.
Un buen hotel para hospedarse es el Francis Mac Donald en la Queen Square. Pero hay una variedad de lugares desde los Famosos Bed and Breakfast a hoteles de súper lujo.
Ofrecemos visitas a Bath en varios de nuestros circuitos:
- Mini-Tour: Inglaterra, Gales y Shakespeare de 3 días
- Tour del Sur, Gales y País de Shakespeare de 5 días
- Gran Tour de las Islas Britanicas de 16 días
Así como en nuestra excursión desde Londres:
¿Quieres quedar como un rey?
No hay duda que el mejor regalo que se le puede hacer a una persona amada es compartir tiempo de calidad.
Un gran regalo es invitar a su pareja a pasar un par de noches en Bath.
Alojarse en un hotel con Spa y darse todos los baños que quieran, masajes y cuanta terapia exótica les ofrezcan.
Salir de compras en los mercadillos y pasajes peatonales.
Cenar en los cientos de restaurantes originales que ofrece la ciudad.
Estos son algunos de los mejores hoteles con Spa que ofrece Bath.
Consultenos para mas opciones.